Consideraciones éticas en la practica de la enfermería
La ética, definida simplemente, es un principio que describe lo que se espera en términos de correcto y correcto e incorrecto o incorrecto en términos de comportamiento. Por ejemplo, las enfermeras están sujetas a los principios éticos. La ética y la práctica ética están integradas en todos los aspectos de la atención de enfermería.
Las dos clasificaciones principales de los principios éticos y el pensamiento ético son el utilitarismo y la deontología. La deontología es la escuela de pensamiento ético que exige que tanto los medios como el objetivo final sean morales y éticos; y la escuela utilitaria de pensamiento ético afirma que la meta final justifica los medios incluso cuando los medios no son morales.
Los principios éticos a los que deben adherirse las enfermeras son los principios de justicia, beneficencia, no maleficencia, responsabilidad, fidelidad, autonomía y veracidad.
La justicia es equidad. Las enfermeras deben ser justas cuando distribuyen los cuidados, por ejemplo, entre los pacientes del grupo de pacientes que están cuidando. La atención debe distribuirse de manera justa, justa y equitativa entre un grupo de pacientes.
Beneficencia es hacer el bien y lo correcto para el paciente.
La no maleficencia es no hacer daño, como se afirma en el histórico Juramento Hipocrático. El daño puede ser intencional o no intencional.
La rendición de cuentas es aceptar la responsabilidad de las propias acciones. Las enfermeras son responsables de sus cuidados de enfermería y otras acciones. Deben asumir todas las consecuencias profesionales y personales que puedan derivarse de sus actos.
Fidelidad es cumplir las promesas. La enfermera debe ser fiel y fiel a sus promesas y responsabilidades profesionales al brindar atención segura y de alta calidad de manera competente.
La autonomía y la autodeterminación del paciente se mantienen cuando la enfermera acepta al cliente como una persona única que tiene el derecho innato de tener sus propias opiniones, perspectivas, valores y creencias. Las enfermeras alientan a los pacientes a tomar sus propias decisiones sin juicios ni coerción por parte de la enfermera. El paciente tiene derecho a rechazar o aceptar todos los tratamientos.
La veracidad es ser completamente sincero con los pacientes; las enfermeras no deben ocultar toda la verdad a los clientes, incluso cuando pueda causarles angustia.
Los problemas y preocupaciones éticos más comunes en el cuidado de la salud incluyen la asignación de recursos escasos y problemas relacionados con el final de la vida.