Conflictos éticos del uso de inteligencia artificial y tecnología autónoma
La inteligencia artificial ciertamente ofrece un gran potencial comercial. Pero, ¿en qué punto los sistemas de IA cruzan una línea ética hacia un territorio peligroso?
Reconocimiento facial
El uso de software para encontrar personas puede convertirse rápidamente en un problema poco ético. Según el NY Times, existen varias preocupaciones sobre el reconocimiento facial, como el mal uso, los prejuicios raciales y la restricción de las libertades personales. La capacidad de rastrear los movimientos y la actividad se transforma rápidamente en una falta de privacidad. El reconocimiento facial tampoco es infalible y puede crear sesgos en ciertas situaciones.
Reemplazo de trabajos
Si bien esto se anticipa hasta cierto punto, la IA está destinada a aumentar la automatización de tareas de bajo nivel en muchas situaciones para que los recursos humanos puedan usarse en iniciativas más estratégicas y tareas laborales complicadas. La eliminación a gran escala de puestos de trabajo tiene a muchos trabajadores preocupados por la seguridad laboral, pero es más probable que la IA conduzca a la creación de puestos de trabajo.
Seguimiento de la salud
La pandemia trajo el rastreo de contactos a la corriente principal. ¿Es ético rastrear el estado de salud de las personas y cómo afectará eso las limitaciones que les imponemos?
Sesgo en la tecnología de IA
La tecnología es construida por programadores y hereda el sesgo de sus creadores porque los humanos tienen un sesgo inherente. “La tecnología es inherentemente defectuosa. ¿Importa siquiera quién desarrolló los algoritmos? Los sistemas de inteligencia artificial aprenden a tomar decisiones en función de la capacitación y la codificación de datos, que pueden estar contaminados por prejuicios humanos o reflejar desigualdades históricas o sociales”, según Forbes. El desarrollador líder de IA, Google, incluso ha experimentado un problema en el que el software de IA cree que los enfermeros y las historiadoras no existen.
Tecnología Autónoma
Los autos sin conductor, las armas robóticas y los drones de servicio ya no son cosa del futuro, son cosa del presente y vienen con dilemas éticos. Las máquinas robóticas en lugar de soldados humanos son una posibilidad muy real, junto con los automóviles autónomos y la entrega de paquetes a través de drones no tripulados.
La tecnología autónoma tiene un gran impacto en lo que respecta al potencial comercial, pero existe una gran preocupación que surge al permitir que la tecnología programada funcione aparentemente sin la supervisión necesaria. Es una preocupación ética que se menciona con frecuencia que confiamos demasiado en nuestra tecnología sin comprenderla por completo.